Al configurar los tipos impositivos, puedes optar por sumar o restar tipos, lo que supone una diferencia significativa. La diferencia es cómo se reflejarán los tipos impositivos en el precio de los servicios.
Sin embargo, si no pagas IVA, no tienes que preocuparte de configurar los tipos impositivos.
Tipo impositivo añadido
Si seleccionas el tipo impositivo añadido, el precio del servicio aumenta automáticamente en el porcentaje establecido.
En la práctica, tu servicio cuesta 100 euros sin el tipo impositivo. Estableces el tipo impositivo añadido en un 20%. Por tanto, el precio del servicio se ajusta automáticamente y, en lugar de los 100 euros originales, el servicio cuesta ahora 120 euros (100 + 20%).
En tu sitio web de reservas, los clientes ven que el servicio cuesta 100 €, el tipo impositivo 20 € y pagan 120 € en total.
Tipo impositivo deducido
Si eliges el tipo impositivo deducido, los precios establecidos siguen siendo los mismos. Esta opción es ideal si quieres mostrar a los clientes el tipo impositivo, pero no afecta al total que pagan.
Por ejemplo, has fijado el precio del servicio en 100 euros. Eliges un tipo impositivo de deducción del 20% para este servicio. El precio del servicio sigue siendo el mismo, es decir, 100 €, con el tipo impositivo incluido.
En tu sitio web de reservas, los clientes ven el precio total del servicio: 100 €. Al pagar, ven el precio desglosado en precio del servicio: 83,33 € y el tipo impositivo de 16,67 €.